Gobierno ruso critica politización de premio Oscar a documental «Navalny»
Tensión entre Rusia y Occidente se refleja en victoria del documental «Navalny».
Un documental sobre la opresión política de Alexei Navalny, una figura antigubernamental rusa, fue premiado en la 95ª edición de los Premios de la Academia, y la parte rusa lo criticó como «politización de Hollywood». La película, titulada «Navalni», se centra en el proceso de envenenamiento de Navalny con un agente nervioso desarrollado en la antigua Unión Soviética en un avión que se dirigía de Siberia, Rusia a Moscú en agosto de 2020, y en su posterior tratamiento en un hospital alemán. Occidente señaló a las autoridades de inteligencia rusas como responsables del ataque con agua venenosa de Navalni, ya que se afirma que intentaron matarlo para silenciar las críticas públicas al presidente ruso Vladimir Putin.
El Kremlin negó enérgicamente las acusaciones de participación terrorista en el ataque con veneno, pero en la película, Navalni se disfrazó como un funcionario de alto rango del Servicio de Seguridad Federal de Rusia (FSB) y realizó una llamada telefónica con el agente del FSB que intentó envenenarlo, y el agente confesó directamente la verdad del caso. El documental también aborda la represión política en Rusia y las protestas que se llevaron a cabo después del envenenamiento de Navalni.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, criticó la película como «politización de Hollywood», aunque admitió que no la había visto. Tras recibir tratamiento en Alemania, Navalni fue detenido por las autoridades rusas en enero del año siguiente y actualmente cumple una condena de 11 años y 6 meses de prisión por estafa y desacato.
La victoria del documental en los Premios de la Academia se produce en un momento en que las tensiones entre Rusia y Occidente se encuentran en un nivel muy alto, con acusaciones mutuas de interferencia en las elecciones y de espionaje, y la reciente escalada de la violencia en Ucrania. Además, la reciente detención de Navalni ha sido objeto de críticas por parte de los gobiernos occidentales y de organizaciones de derechos humanos, y ha llevado a sanciones contra altos cargos rusos y a la expulsión de diplomáticos rusos de varios países. El documental ha sido una herramienta importante para llamar la atención sobre la situación de Navalni y la represión política en Rusia, y su victoria en los Premios de la Academia ha sido vista como un reconocimiento internacional del trabajo realizado para exponer la opresión política en el país.
